Necesidad comunitaria que se convirtió en atracción turística.

En el pueblo de Adjuntas existe un hermoso puente pintoresco que está acaparando las redes sociales de todos aquellos que les encanta hacer turismo interno.

Esta nueva atracción turística surgió de la necesidad de una familia residente en el municipio tras el paso del huracán Georges en el 1998. El puente de concreto, que conectaba a las residencias en la carretera principal, se derrumbó por las fuertes corrientes del río. Al no haber forma de cruzar y ver que las personas mayores no podían atravesar por la corriente del agua, José Guzmán creó el puente colgante para que su familia pudiera sobrevivir. La construcción duró 8 meses en terminar y lo estuvieron utilizando durante 5 años en lo que le volvían a construir el puente de cemento.

Al ver que las cosas en la comunidad se estaban estabilizando pensó en derrumbarlo. Su esposa lo convenció de no quitar el puente, ya que era parte de la historia del lugar y podía servir de forma educativa a las nuevas generaciones a que pasen por la experiencia de cruzar y conozcan un puente colgante. Así, que luego del huracán María en el 2017, decide remodelarlo y pintarlo de muchos colores para llamar la atención y las personas se detengan en el lugar.

La alegría de Guzmán contagia a todos. A él le encanta ver a las personas sonreír cuando se están tomando fotos en el recorrido. La experiencia de cruzar el puente y el buen trato de todas las familias que viven allí es increíble. El donativo que piden en la entrada es de $1 por persona y se utiliza para mantener las facilidades limpias y seguras. Si tienen hambre y desean comerse algo ligero para seguir la aventura, allí rápido te preparan empanadillas, cuajitos o la fritura que tengan en el momento.

Para ver vídeo sobre el puente colgante de Adjuntas acceda a:https://youtu.be/C-O7dekHbI8