A través del programa de Innovaciones Madereras, se concedió beca a la organización GreenWood para capacitar a artesanos y carpinteros puertorriqueños para el desarrollo y conservación de bosques.
Conscientes de la gran oportunidad de desarrollo económico que representa la recuperación sostenible de madera en una región cada vez más propensa a huracanes, el Servicio Forestal federal (USFS) del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) becó a la organización GreenWood para que provea oportunidades de capacitación y acceso a mercados a trabajadores puertorriqueños.
El director del Centro Climático del Caribe del USDA, William Gould, indicó que a través del Programa de Innovaciones Madereras, el USFS propulsa una nueva visión que concilia la conservación de las tierras boscosas con la recuperación de madera para fines de desarrollo económico. Esas expectativas se logran mediante la siembra y el manejo de esos ecosistemas concientizando de la riqueza y el valor que aportan los árboles vivos.
“El huracán María despertó la conciencia de la abundancia de recursos madereros en Puerto Rico. Esa experiencia también plasmó la necesidad de planificar y mejorar la capacidad para recuperar los recursos madereros de una manera beneficiosa. El objetivo del programa de Innovaciones Madereras es ofrecer apoyo para que se gesten en Puerto Rico las capacidades que permitan utilizar esos recursos madereros de forma positiva”, explicó el doctor Gould. “A medida que el planeta se calienta más, se espera que los huracanes aumenten en intensidad, por lo que es necesario establecer un enfoque holístico para el manejo forestal que permita conservar la biodiversidad, el manejo del agua, la recreación, la educación y los recursos madereros”, expresó el científico.
Dijo que las becas del programa son un paso importante en esa dirección. Este año la beca se otorgó a GreenWood, una organización sin fines de lucro que desde 1993 promueve el desarrollo de productos de madera con un enfoque en el manejo forestal sostenible, visión que trajo a Puerto Rico luego del azote del huracán María. El proyecto de dos años—que gestiona el Instituto Internacional de Dasonomía Tropical del USFS—se conoce como la “Empresa forestal sostenible: vinculación de los recursos forestales, los artesanos y los mercados de la madera con el Artisan EcoTours para mejorar la capacidad de procesamiento de la madera en Puerto Rico”.
El proyecto consiste en unir a los trabajadores locales de madera con contrapartes de renombre internacional para una experiencia de enseñanza única donde los participantes de dentro y fuera de Puerto Rico aprendan habilidades prácticas de los expertos. Además, visitarán la fuente primaria de la madera—los bosques—para obtener inspiración para el diseño de productos y para conectar la gestión forestal con la innovación y desarrollo de productos locales.
El Programa de Innovaciones en Madera comenzó en el año 2015 y ofrece subvenciones para estimular la innovación en los mercados de productos y energía de madera. Las áreas de enfoque a nivel de Estados Unidos incluyen: madera en grandes cantidades, energía de madera renovable y desarrollo tecnológico para la reducción de combustible, así como manejo forestal sostenible.
El año pasado el programa otorgó otra beca de dos años de duración al Centro para la Conservación del Paisaje, una organización local que desarrolla proyectos y actividades para la conservación del paisaje en el este de Puerto Rico. Su proyecto se denominó “Beneficios económicos y servicios ecosistémicos en tierras privadas cerca del Bosque Nacional El Yunque: conectando prácticas, productos y mercados con la utilización innovadora de madera y otros productos forestales”. Los objetivos de este trabajo incluyen la evaluación del mercado de productos forestales de tierras privadas alrededor de ese bosque y la creación de una herramienta para comprender mejor el panorama social de los productos de madera en la zona. En esa dirección, el director del Centro, Edgardo González, y su equipo trabajan en un análisis de redes de interacción social, que producirá un mapa para mejorar la colaboración entre los administradores forestales, los propietarios privados, las instalaciones de procesamiento de madera y los mercados de productos de madera. Se aspira a que la información ayude a anticipar cuellos de botella en la cadena de suministro y procesamiento, y mejorar el valor de mercado de los recursos madereros locales. Durante el segundo año del proyecto la organización coordinará demostraciones y trabajos de aprovechamiento forestal de impacto reducido para documentar prácticas de extracción y aprovechamiento de madera. De igual forma, se estarán ofreciendo talleres de manejo y desarrollo de productos madereros en la región este de la isla.
Anteriormente, el programa de Innovaciones Madereras concedió otra beca a la Universidad de Puerto Rico en un proyecto dirigido por la profesora Elvia Meléndez-Ackerman, de la Facultad de Ciencias Naturales. El objetivo es, en parte, desarrollar un marco para establecer un grupo multisectorial con conocimiento de los productos y recursos forestales. Para lograr esto, un grupo de entidades gubernamentales, universitarias y privadas se ha estado reuniendo para crear un Consejo Multisectorial de Recursos Forestales de Puerto Rico que serviría como centro de intercambio de conocimientos y oportunidades con la capacidad de compartir las mejores prácticas en el desarrollo de una industria maderera local sostenible.
Gould explicó que el Centro Climático del Caribe del USDA colabora en proyectos financiados por el Programa de Innovación Maderera en Puerto Rico porque tienen como objetivo aumentar la resiliencia económica de las comunidades rurales, los dueños de tierras y los agricultores, así como mejorar la adaptación climática y la reducción de carbono. “Cultivar árboles y capturar carbono en productos de madera de larga duración y alto valor es una solución clave para reducir las emisiones de carbono a nivel mundial”, mencionó el doctor Gould. “Tenemos una gran oportunidad de aumentar nuestra capacidad para responder a los desafíos climáticos, mientras brindamos oportunidades económicas y promovemos la riqueza ecológica y cultural de Puerto Rico”, destacó.